Justicia, democracia y paz





Justicia, democracia y paz -gritan los hechos-, para los mandatarios estadounidenses, la OTAN, los neocolonialistas europeos y hasta para altos representantes de la Organización de Naciones Unidas (ONU), son el papel sanitario que utilizan después de los banquetes bélicos.

Qué justicia, democracia y paz, puede pregonar el Premio Nobel de la ¿Paz?, Barack Obama, cuando protege a los terroristas declarados de Miami, Luis Posada Carriles, al difunto Orlando Bosch y demás dinamiteros de C-4 y, en cambio, impide que René González, excarcelado bajo “libertad” supervisada dentro de los Estados Unidos regrese a Cuba y  permite que sus cuatro compañeros Antonio Guerrero, Ramón Labañino, Fernando González  y Gerardo Hernández, permanezcan en prisión injustamente cumpliendo severísimas penas de cárcel por alertar a la Casa Blanca de las acciones terroristas contra la nación caribeña y ese propio país.

¿Hay justicia, democracia y paz, en la brutal represión del Gobierno de Obama contra los indignados del puente de Brooklyn, protesta  iniciada frente al edificio de Wall Street, en Nueva York, por la abismal desigualdad social y económica de los ciudadanos estadounidenses?

¿A qué democracia justiciera y pacífica puede llamarse las invasiones a Irak y Afganistán,  la destrucción del legítimo gobierno de Libia y el brutal asesinato de su presidente Gadafi, a la usanza de los linchamientos de negros al estilo Ku Kux Klan?

Ahora en Libia, tras la repartición del oro negro, quieren los neocolonialistas obtener más ganancias con la reconstrucción de,  hasta hace poco de seis meses, el más floreciente país africano, arrasado por las bombas de la OTAN.

Sin embargo, hay frases que enlutan y desprestigian aún más a la justicia, la democracia y la paz, por ejemplo: “una nueva Libia ha nacido hoy…Tenemos que alegrarnos de lo que hemos hecho”, afirmó el ministro de defensa de Italia Ignazio la Russa.

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, dijo que tras la muerte (asesinato) del líder libio comenzó la transición histórica de Libia y que estos meses “deben traducirse en oportunidades para todos”.

¿Se refirió a la repartición del botín? ¿La ONU tiene su parte?

¡Qué bochorno: justicia, democracia y paz!

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