Cosas del bloqueo: El casco y la buena idea



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Otra de tantas historias donde el ingenio y la alegría del cubano suplen las carencias para continuar labrando su futuro.
La ingeniosidad de la camagüeyana Yamila Bueno Gómez es muy especial y efectiva frente a los avatares de la necesidad de trasladarse.
La ingeniosidad de Yamila es efectiva para trasladarse
A pasos apresurados con una expresiva sonrisa de triunfo y un casco de motorista batiendo el aire, la compañera pidió botella al auto del semanario Adelante que intentaba salir de la complicada área de parqueo en la calle Cisneros. Dentro del carro suspiró confiada y acomodó sobre sus piernas la cartera y el casco protector.
Aventón, pedir jalón, tirar dedo pulgar, pedir bola, pedir bote, autostop... dígase como se diga en cualquier parte de América Latina y el mundo, es una opción gratis de viajar de un lugar a otro por cuenta y riesgo.

En Cuba, la botella, tan popular como la croqueta y el “granifrío”, es una manera salvadora de trasladarse ante el déficit de transporte que angustia las repletas paradas de ómnibus y multiplica los inventos alternativos de épocas disímiles.

Disímiles son los ardides para el abordaje de vehículos diversos en puntos de detenciones obligadas de sus conductores y hasta en rectas veloces, pero confieso que la ingeniosidad de la camagüeyana Yamila Bueno Gómez es muy especial y efectiva frente a los avatares de la necesidad de trasladarse.

-¿Se te rompió la motorina?

-No, yo no tengo moto.

-¿Y entonces ese casco?

-Me lo compró mi esposo, con el casco salgo a coger botella y me ha dado buenos resultados, pues algunos conductores cuando los abordo me dicen que no traen casco de reserva y entonces yo les muestro el mío y no les queda más remedio que llevarme.

Yamila es cajera de la Empresa Nacional de Proyectos Agropecuarios, entidad ubicada dentro de los límites del Centro Histórico de la Ciudad y vive en el Microdistrito Ignacio Agramonte, en la periferia de la capital provincial, además de que por su profesión frecuenta diferentes bancos de la localidad.

“No tengo distinción por el tipo de vehículo para viajar, la cuestión es llegar temprano al trabajo, a la casa, y que todas las gestiones las pueda hacer en tiempo. Fíjate si el casco es práctico, que compañeras de mi centro laboral a veces me lo piden para resolver cualquier situación”.

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